Para construir equipos que funcionen de manera cohesionada y productiva, es necesario seguir una serie de pautas estratégicas que fomenten la colaboración y el enfoque en los objetivos.
- Definir una misión y objetivos específicos: Aportar claridad sobre el propósito del equipo.
- Formar equipos multidisciplinares: Aprovechar la diversidad de habilidades y perspectivas de sus miembros.
- Fomentar la participación: Involucrar a todos los miembros en la toma de decisiones para aumentar el compromiso.
- Establecer normas y canales de comunicación: Definir cómo se va a trabajar y a comunicar el equipo.
- Reconocer y valorar el esfuerzo: Motivar a los miembros reconociendo sus contribuciones.
- Facilitar formación: Ofrecer capacitación en habilidades sociales y técnicas de gestión de conflictos.
Las evaluaciones de desempeño son una herramienta útil para identificar fortalezas y áreas de mejora, contribuyendo a la cohesión del equipo.