La Ley 7/2022 de residuos establece un orden de prioridad en la gestión, conocido como jerarquía de residuos: 1º Prevención, 2º Preparación para la reutilización, 3º Reciclado, 4º Otro tipo de valorización (ej. energética) y 5º Eliminación (vertedero), que es la última opción.
En los centros sanitarios, la segregación en origen (separar cada residuo donde se genera) es crucial. Los residuos no peligrosos se clasifican en:
- Grupo I - Residuos Asimilables a Urbanos: No tienen riesgo especial. Son similares a los domésticos.
- Ejemplos: Restos de comida de cocina, papel, cartón, envases, vidrio.
- Gestión: Se depositan en los contenedores de recogida selectiva: azul (papel/cartón), amarillo (envases), verde (vidrio) y gris/negro (resto).
- Grupo II - Residuos Sanitarios Asimilables a Urbanos: Proceden de la actividad sanitaria pero no son infecciosos.
- Ejemplos: Material de curas no infeccioso, yesos, bolsas de orina vacías, empapadores, pañales.
- Gestión: Se depositan en bolsa de color marrón dentro de un contenedor negro/gris.