1. Humectación
Eliminar suciedad superficial. Se usa agua fría para no fijar manchas de proteínas (sangre).
2. Prelavado
Remojar y ablandar la suciedad con detergente y, a veces, lejía.
3. Lavado
Limpieza y desinfección principal con detergente, blanqueador y alta temperatura.
4. Aclarado
Eliminar restos de suciedad y productos químicos con agua limpia.
5. Centrifugado
Eliminar el máximo de agua posible mediante alta velocidad de rotación.
6. Lejiado (Blanqueo)
Blanquear y desinfectar la ropa. Puede hacerse en el prelavado o después del lavado.
7. Neutralizado
Eliminar restos de cloro y alcalinidad para proteger las fibras.
8. Suavizado
Añadir suavizante en el último aclarado para mejorar el tacto y el olor.