Los EPI se clasifican según la parte del cuerpo que protegen:
- Protectores de la cabeza: Cascos de seguridad.
- Protectores del oído: Tapones, orejeras.
- Protectores de los ojos y de la cara: Gafas, pantallas faciales.
- Protección de las vías respiratorias: Equipos filtrantes (mascarillas) o aislantes.
- Protectores de manos y brazos: Guantes contra agresiones mecánicas, químicas, eléctricas o térmicas.
- Protectores de pies y piernas: Calzado de seguridad, de protección o de trabajo; polainas.
- Protectores del tronco y el abdomen: Chalecos, mandiles (ej. contra rayos X).
- Protección total del cuerpo: Equipos anticaídas (arneses), ropa de protección.