Precauciones Estándar y Actuación ante Pinchazo Accidental

Las precauciones estándar son la estrategia básica para prevenir la transmisión de infecciones. Se aplican a TODOS los pacientes, asumiendo que la sangre y todos los fluidos corporales pueden ser infecciosos. Incluyen el lavado de manos, uso de guantes, batas, mascarillas y protección ocular.

Se complementan con precauciones basadas en el mecanismo de transmisión (por contacto, por gotas o por vía aérea) para pacientes con infecciones específicas.

Actuación ante un pinchazo accidental:

  1. Cura tópica de la herida: Limpiar la herida con agua y jabón, permitir una pequeña hemorragia y desinfectar con povidona yodada o similar.
  2. Identificación de la fuente: Comunicar al servicio de prevención y, si es posible, identificar el origen del material contaminante para analizarlo.
  3. Verificación de la inmunización: Comprobar el estado vacunal del trabajador (especialmente Hepatitis B y Tétanos).

El riesgo de contagio tras un pinchazo es del 30% para Hepatitis B (VHB), 3% para Hepatitis C (VHC) y 0,3% para VIH. Existen protocolos específicos de profilaxis post-exposición para VHB y VIH.