La zona de lavado cuenta con dos sistemas principales, que se adaptan a diferentes volúmenes y necesidades de producción.

1. Lavadora convencional (Sistema discontinuo):
   • Realiza todas las fases del lavado de forma separada y ordenada en un único tambor rotativo.
   • Se usa para pequeños volúmenes de ropa o prendas que requieren un tratamiento especial.
   • Su principal inconveniente es un mayor consumo de agua y energía en comparación con el sistema continuo.
2. Túnel de lavado (Sistema continuo):
   • Divide las fases del lavado en diferentes compartimentos o bombos comunicados, que funcionan al mismo tiempo con distintos lotes de ropa.
   • Es muy ventajoso para grandes volúmenes de ropa (el 80% del total).
   • Aprovecha y recircula el agua, lo que supone un importante ahorro de agua, energía y productos químicos.