El servicio de lencería tiene una serie de funciones clave para asegurar un flujo constante y adecuado de ropa limpia en todo el hospital.

1. Garantizar la higiene: Asegurar que toda la ropa esté perfectamente limpia e higienizada, sin riesgo de ser un foco de infección.
2. Controlar el tratamiento: Supervisar que el proceso de lavado, secado y planchado sea eficaz pero con el mínimo deterioro para los tejidos.
3. Vigilar el estado de la ropa: Asegurar la reparación de prendas descosidas y la retirada de aquellas que ya no son adecuadas para su uso, gestionando su reposición.
4. Gestionar la compra: Adquirir nuevas prendas para la reposición, manteniendo un equilibrio entre calidad y coste.
5. Almacenar y conservar: Guardar y velar por la correcta conservación de los tejidos y el mantenimiento de la dotación de ropa.
6. Distribuir la ropa: Repartir la lencería a los diferentes departamentos según sus necesidades, cumpliendo los horarios y plazos establecidos.