La distribución consiste en el reparto de los menús desde la cocina central a las plantas de hospitalización. Se realiza mediante carros cerrados para evitar la contaminación y mantener la temperatura.
Existen distintos tipos de carros según la tecnología que emplean:
- Carros Isotérmicos: Son los más sencillos. Están aislados térmicamente, pero no generan ni frío ni calor, por lo que tienen el inconveniente de que los alimentos se enfrían durante el traslado.
- Carros Térmicos o de Retermalización: Incorporan un sistema de calentamiento de bandejas y sensores de temperatura. Se usan en la línea caliente para que cada plato se sirva a la temperatura adecuada. La mayoría tienen un departamento separado para platos fríos.
- Carros de Regeneración: Son los utilizados en el sistema de cadena fría. Regeneran los alimentos mediante un sistema de transmisión de calor de alto rendimiento (termocontacto). Los sistemas modernos calientan solo las elaboraciones que lo requieren, manteniendo el resto de la bandeja fría.