Proveer ropa limpia, suficiente, confortable y de buena calidad.
Organizar el área para mantener los niveles de producción cualitativos y cuantitativos.
Garantizar que la ropa procesada cumpla con condiciones higiénicas óptimas.
Supervisar la eliminación de suciedad, desinfección, blanqueo y acabado.
Aprovisionamiento de productos, reposición de ropa y control de equipos.